Borran la sonrisa
Dominando de principio a fin, los Sooners vencen 27-19 a los Jokers y ligan su segunda victoria al hilo
Atrás quedó el descalabro en su juego inaugural ante los Jugosos en el que, cabe mencionar, no se vieron mal ni mucho menos, simplemente el rival fue más contundente; pero los primeros colonos dejaron un gran sabor de boca en su presentación de la temporada Back to the Football por lo que las victorias no se harían esperar.
Primero fueron los Aztecas CDMX y ahora le hicieron lo propio a unos Jokers que venían de una contundente victoria ante los Pig Machine. El juego fue como se esperaba y no decepcionó en lo más mínimo pues la intensidad y los puntos estaban asegurados; para muestra, basta ver la anotación de Julio Bustillos quien regresó el Kickoff hasta la zona prometida. Los Sooners fueron claros “El juego es mío”.
Pero los príncipes payasos del crimen no iban a doblar las manos a las primeras de cambio y encontraron el momentáneo empate en las manos de Moisés Zea. Los morados responden “Tal vez, pero hoy no”. El diálogo fue efímero, las líneas sobran cuando se habla con hechos en el emparrillado y se reafirma con un nuevo ingreso a las diagonales con Junnuen Martínez. “¿Decías?” preguntó el naranja mientras veía a su rival en el piso.
La mecha se prendió en la segunda mitad del partido. Los Jokers todavía tenían muchas cartas bajo la manga y no dudarían en usarlos pues justo en el inicio del completo devolvieron el gesto. “No tan rápido” exclamaron los púrpuras y nuevamente igualaron los cartones por conducto del mismo Zea. “Eres bueno, lo admito, pero esta noche se tiñe de naranja” y Bustillos les repitió la dosis.
Un último cuarto, una ligera ventaja de los Sooners y un impetuoso Joker que buscaba regresar al juego a como de lugar. Una sonora carcajada se escuchó en todo el Velódromo Olímpico con el TD de Ángel Alfaro y parecía que el momento anímico se inclinaría de lado de los príncipes payasos del crimen. Pero no esta noche; los primeros colonos, aquellos que jamás se vieron abajo en el marcador mantuvieron la misma línea y propinaron el golpe definitivo, orquestado por Javier Cuellar, para fulminar a unos morados que vendieron muy cara la derrota. “Nos veremos pronto”, sentenció el naranja.
