El marcador emula la canción de José José en el triunfo de los Demonios ST sobre Black Thunder.
Mentiras son todas mentiras, cosas que dice la gente… Entre que son rumores o no, lo cierto aquí es que hay un equipo que sigue en pie de guerra para demostrar el por qué se les conoce como ‘El Show’, cual ave fénix, que busca renacer de las cenizas, así lo hacen ‘Los Infernales’, quienes llegan desde las mismísimas tierras del inframundo a recobrar lo que es suyo.
Que yo soy otoño en tu vida y tu eres dulce primavera… Contrario a lo que se pudiera pensar, el clima otoñal les sienta bien a los Demonios, se sienten más cómodos en el frío (aunque no lo habían demostrado). La prueba era reencontrarse con el triunfo ante uno de los favoritos del certamen, los finalistas primaverales de Black Thunder que llegan con la sed de revancha, dispuestos no a igualar, sino a superar lo realizado el semestre pasado.
No saben que guardo un verano que cuando te miro, te quema… Dicha mirada era penetrante e hipnotizante, ‘Los Herederos de Thor’, pese a que corre sangre de dioses por sus venas, poco pudieron hacer ante los ataques del Showtime que tuvieron dos TD en la primera mitad (Manuel Aguirre y Román Robles), mientras que el Thunder respondió con la combinación de Abraham Villarreal y José Pablo del Valle.
No importa que a mi no me entiendan y que por lo bajo comenten… Después de todo, lo que habla es lo que sucede en el emparrillado. Aunque ‘Los infernales’, no juegan solos. Tienen una ferviente porra femenina que se desgañita la garganta en cada juego de ellos, un incesante apoyo y la primera aduana para todos los rivales que osen desafiarlos, bautizadas desde hoy como ‘Las cancerberas’, mismas que tuvieron un duelo aparte con la siempre fiel porra de los Thunder.
Para el complemento, ‘Los Herederos de Thor’ lograron hacerse de dos anotaciones más en el complemento (Yair García y Omar Toledo), pero, aquí también regresamos al título de la nota, pues los Demonios les doblaron las anotaciones con un total de cuatro (destacando a Román Robles y Luis Palma). Lo que queda al final es “Que existe una gran diferencia…” si la conocen, saben lo que sigue.