Una nueva Final
Al derrotar 45-34 a los Chivos Negros, los Búfalos Toluca regresan para pelear una vez más por el LEXFA Bowl.
Si algo nos ha enseñado esta Temporada Otoño 2019 es que está lleno de sorpresas y revanchas, desde una nueva camada de jugadores que vienen a refrescar las huestes de todos los equipos, la consolidación de ciertos conjuntos, la desaparición de otros y la confirmación de que todo es posible. Desde campeonar el semestre pasado y quedar fuera a la primera, hasta mantener el ritmo y seguir en plan grande.
Esto último es el caso de los Búfalos Toluca, mismos que regresan a una Final tras haber perdido en la Temporada Primavera, ante los Gamos CUM, en la División +35. Hoy, sin límite de edad, nuevamente dan muestra de su entereza y constancia para volver una vez más a pelear por aquello que ya les fue negado.
La aduana para llegar a dicha instancia no fue nada sencilla, enfrente estaban los vigentes campeones primaverales, los Chivos Negros, que buscaban dar la campanada y tumbar al actual líder de la División II para consagrar un 2019 de ensueño. Y, sí, en eso se quedará, en un sueño, ya que el triplete de Juan Acevedo, los pases de Emilio León y Aurelio Miranda -sumado a las anotaciones de Enrique Castillo y Alexis Ramos– fueron insuficientes.
Todo eso quedó atrás, el caprichoso destino no quiso verlos nuevamente en el LEXFA Bowl, se cobró todas las brujerías de ‘Los Baphy’. La penitencia fue ejecutada por tres verdugos escarlatas que hicieron de las suyas en todo el partido y se convirtieron en un auténtico dolor de cabeza para la defensa de los cabríos que no lograron ponerles el freno.
José Antonio Becerril, César Chavarría y Maurilio Esquivel fueron el tridente perfecto para ponerle fin a cualquier intento de reacción por parte de los Chivos Negros. Vencedor y vencido se ganaron el respeto de su contraparte, no hubo reclamos ni roces, todo lo contrario. Hubo un apretón de manos, un fraterno abrazo y un sincero deseo de suerte y éxito. Escenas que sin duda engrandecen al deporte y lo ponen a un nivel superlativo. Que venga lo mejor para ambos.
