Cabalgando hacia el triunfo
Las conversiones hacen la diferencia y los Mustangs se imponen 22-18 al equipo de Army en el cierre de la S1.
Muchas veces se tiene el erróneo pensar que sólo basta con anotar, las conversiones llegan a ser relegadas a un segundo plano. Sí se anota, que padre; si no, también, nadie se inmuta. A veces da rabia, impotencia o simple y sencillamente genera una burla de los mismos compañeros por no poder anotar estando tan cerca de la zona prometida, mismo que se adereza con el deprimente grito de “Ahh” que proviene de la tribuna.
Esto se dice porque, de sólo ser un juego de anotar y ya, ambos equipos hubieran quedado empatados, Mustangs y Army se hubieran ido a tiempo extra y ahí se definiría al ganador, o quien sabe, igual y nadie da el salto de calidad y todo queda en un salomónico empate. Que bueno que no fue el caso.
El equipo de los ‘Skulls and bones’ fue el primero en atacar, querían poner a prueba a los afamados ‘Indomables’ y de momento lo lograron con la combinación de Josele Aguillón y Rafael Lugo. Pero dicha acción no le causo mucha gracia a los equinos que pronto relincharon con la anotación de Edgar Mares y la conversión de Omar Gálvez.
La segunda mitad aumentó en intensidad y las ganas de obtener el triunfo eran evidentes en ambos conjuntos. Los de Army nuevamente tomaron la batuta del encuentro y dieron el primer revés del complemento con la primera anotación del RB, Luis Ríos. La respuesta Mustang no se hizo esperar y recuperó la ventaja por conducto de Gael Mejía, quien hizo la jugada grande del partido al recorrer prácticamente todo el campo para hacer su TD.
En los instantes finales, ‘Los Indomables’ continuaron relinchando, se sentían libres, en comunión con los suyos, lo que provocó una nueva anotación y conversión de Omar Gálvez (proclamado MVP del partido) para poner una ventaja insuperable ante los Army que, pese a tener un nuevo TD de Luis Ríos, no fue suficiente pues no lograron concretar ningún punto extra en todo el partido. He ahí la diferencia.
